Mucho se ha escrito sobre los anillos de piedra.
Los hay de todos los tamaños: enormes, catedralicios casi; otros, pequeños, tan modestos que se confunden con paredes de corrales antiguos.
En su interior, en el espacio que delimitan, pasan cosas...
Energías que proceden del entorno se condensan en el lugar limitado por las piedras...
¿Cómo serían antaño? Pensad que han pasado milenios...lo que vemos es tan sólo el esqueleto, la estructura de un arcano.
Ya no queda nada de las antiguas ceremonias...donde se comulgaba con lo natural, donde ardían las llamas de las hogueras solsticiales...
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